Los tres poemas que siguen forman parte de la La Amada Inmóvil, obra de Amado Nervo, nacido un 27 de agosto.
¿Llorar? ¡Para qué!
Este es el libro de mi dolor:
lágrima a lágrima lo formé;
una vez hecho, te juro, por
Cristo, que nunca más lloraré.
¿Llorar? ¡Por qué!
Serán mis rimas como el rielar
de una luz íntima, que dejaré
en cada verso; pero llorar,
¡eso ya nunca! ¿Por quién? ¿Por qué?
Serán un plácido florigelio,
un haz de notas que regaré,
y habrá una risa por cada arpegio…
¿Pero una lágrima? ¡Qué sacrilegio!
Eso ya nunca. ¿Por quién? ¿Por qué?
![]() |
| Me regalo, en este 27, también mi cumpleaños, la energía y la fuerza pictórica de una de las mejores de México, Frida Khalo, al lado de otro de los grandes, Amado Nervo, con su poemario a su Amada inmóvil, y ese dolor que nunca supo más que las letras como forma de sacarlo a todo dolor desde su yo...no es tristeza es pasión e impotencia de no poder hacer más...Gracias a ambos por sus dones y regalos...El cantautor Tony Ávila ameniza este trabajo con "Las nubes"...gracias... |
Su tristeza
Bien venga, cuando viniere,
la Muerte: su helada mano
bendeciré si me hiere…
He de morir como muere
un caballero cristiano.
Humilde, sin murmurar,
¡oh Muerte!, me he de inclinar
cuando tu golpe me venza;
… ¡pero déjame besar
mientras expiro, su trenza!
¡La trenza que le corté
y que, piado, guardé
(impregnada todavía
del sudor de su agonía)
¡la tarde en que se me fue!
Su noble trenza de oro:
amuleto ante quien oro,
ídolo de locas preces,
empapado por mi lloro
tantas veces…, tantas veces…
Deja que, muriendo, pueda
acariciar esa seda
en que vive aún su dolor.
… ¡Es que todo lo que me queda
del aquel infinito amor!
Cristo me ha de perdonar
mi locura, al recordar
otra trenza, en nardo llena,
con que se dejó enjugar
los pies por la Magdalena…
Escamoteo
Con tu desaparición
es tal mi estupefacción,
mi pasmo, que a veces creo
que ha sido un escamoteo,
una burla, una ilusión;
que tal vez sueño despierto
que muy pronto te veré,
y que dirás: “¡No es cierto,
vida mía, no he muerto;
ya no llores…, bésame!”.


No hay comentarios:
Publicar un comentario