domingo, 23 de diciembre de 2018

Premiada de secundaria decide cantar a capella

Premiación por el concurso sobre Artes Plásticas y literatura “Mis Derechos”, en saludo al XXV aniversario de la creación de la Convención sobre los Derechos del niño (CDN), en la Casa del Niño y la Niña, de Centro Habana; también su resultado y actividad de premiación a dibujos, textos, tanto prosa como poesía, dedicado a la Ciudad Maravilla: La Habana, en su 500 aniversario, da de sí con los grupos de estudiantes en las escuelas.

"Radio Progreso, La Onda de la Alegría" regala tres trabajos publicados a propósito de los derechos de la infancia y la adolescencia en Cuba. Convención de los Derechos del Niño (CDN)


( http://twitthat.com/3DaQr ) ( http://twitthat.com/LEfoi ) ( http://twitthat.com/Vkj3R )



jueves, 20 de diciembre de 2018

Historia de Radio Progreso, de 89 a 90: los caminos vuelven a encontrarse

Plegables, llaveros, sello alegórico, jabitas, pegatinas, pullover y el manual de identidad son parte de la Campaña por los 90 años de Radio Progreso, la Onda de la Alegría, cuyo lanzamiento es parte del homenaje que tendrá lugar este 14, por el cumpleaños 89 el 15 de diciembre.

De Festival de la Tierra a On Meditación

Un camino seguido para meditar, o crear desde dos puntos coincidentes en la persona devuelta al origen en la meditación de muchos instantes por viajar dentro de sí mismos.

El resultado no se hace esperar porque es obtener mayor concentración, vitalidad en el trabajo que se hace con el empleo del combustible que significa volver al origen, de donde venimos todos y hacia donde vamos, asimismo crear.

Todos somos migrantes, proyecciones de la OIM

No haré ninguno fuera de La Habana. Pero los viajes son mi condición natural. Padres divorciados, becas, albergues, servicio social... todo me lleva a un viaje semanal, o a dos veces por semana o a todos los días a cualquier hora y el sobrenombre de "Mariana", que me puso un amigo por razones "deambulatorios madrugadeños" en búsqueda de agua carbonatada o un litro de leche...

lunes, 10 de diciembre de 2018

Alberto Ruz Buenfil busca los pasos de su padre en Cuba

Antes de llegar ya nos tenía buscando de sus ancestros, de las personas que estuvieron con su padre y de las raíces que lo conectan a Cuba. No es la primera vez que Alberto Ruz Buenfil viene a Cuba, pero sí los coordinadores del Primer Festival de la Tierra le convocamos en ese amor a la Madre Tierra que va desde su ecoaldea inicial o las luchas personales.

sábado, 10 de noviembre de 2018

Mi blog y los viajes

Para andar con esta plantilla de zapatos necesito viajes, por dentro por fuera, o cualquier tipo de traslación. También lo creo en sitios web o en los vericuetos de mi imaginación, como poema, prosa, un texto sugerente.

De mis dedicatorias en la vida, aunque ya lo dijo quien lo dijo, la vida es un viaje. La mía es un viaje literalmente. Nací en una ciudad que veía má en sueños recurrentes y en vacaciones que lo que la viví, pues a los 3 años de edad salí de ella, para regresar solo de vez en vez por razones laborales de mi madre o deberes de hija, para ver a mi padre.

Luego albergues, visitas a familiares, excursiones a priori, ya que me había acostumbrado a viajar, pues nunca me quedé quieta. De hecho aún no me quedo. Siempre estoy inventando. El "alma naque" me ha dado mis buenos parones, pero con dolores y todo, me reto...si Mick Jagger podía recorrer el escenario ¿cómo no iba a verlo yo en la Ciudad Deportiva?, tan cerca de la casa, así que salté de lo lindo...después, ya es un problema - como "The Rolling Stones" - perseverancia y duro trabajo.

Escribo off line, transcribo, retrotraigo... vivo luego escribo... escribo luego me conecto...

Son las palabras


“No es la apariencia, es la esencia; no es el dinero, es la educación; no es la ropa, es la clase.”
Coco Chanel
Palabras: subjetividad, intuición, sueños, libertad, creencia, cultura, actividad, acción, límite, miedo, observación, memoria, prioridad, asociación, objetividad, lengua, tensión…
Imagínalas, desmóntalas, piénsalas unidas, separadas, ¿Qué conoces de ellas? ¿A qué la asocias en tu vida?
Es solo un ejercicio, de esos que nos hacen mirarnos por dentro o desaprender lo que nos es común o vivimos sin darnos cuenta. ¿Para qué? Como conceptos vienen desde la etimología a la cotidianidad sin que las observemos.
Observa pues el contenido que viene a tu mente para percibirlas en la conciencia activa.
El ejercicio lo trajo a la Asociación de Pedagogos de Cuba (APC) ElianeVeloso, comunista brasileña de larga data de lucha, con unas ganas tremenda de conocer Cuba, viene de Estados Unidos y es una añoranza de 45 años que ahora cumple, completamente en activo con pedagogos, especialistas e interesados que acuden a los cursos, talleres y diferentes convocatorias de la sede cerca de 41 y 42 en el municipio Playa.
El proyecto viene en las palabras adheridas a unas piedras que deben llevar los convocados, -luego se van levantando las piedras por cada dueño, pero ya tienen las palabras que el azar le deparó.
Veloso vivió en Estados Unidos, sufrió la separación forzosa de su país, por razones políticas, tiempo atrás. Cuba siempre fue un tema muy suyo, una constante mirada en su arte, sus vivencias e historia. Hoy pasea las calles en su visita, pensando en los nuevos tiempos, preocupada por lo que el turismo o la afluencia de otros países pueda traer.
Por su parte ella zarpa a puerto cubano, desde sus sueños, con técnicas participativas, de análisis sensoriales para indagar en lo que no vemos de la cotidianidad, nos es inherente, y al conocerlo o hacernos conscientes podemos enfocar, canalizar desde otras miradas sobre nuestra propia experiencia e identidad.

Postdata


Curiosamente murió Avito Rafael de la Torre Mora, un 14 de junio, un hombre, en buen cubano, con más c…… que Maceo, como se dice en Cuba, cuando se es de armas tomar…  y más aventurero que el Che, como dicen algunos cuando quieren reconocer la osadía de un hombre que Daba todo sin razones… ambos nacidos ese mismo día, igual fecha de otros años, y con otras historias.
Avito de la Torre comprometido, combatiente, humilde; de aquellos campesinos que encontraron los expedicionarios del Granma en la Sierra Maestra, los reunidos luego de diezmadas las tropas, para hacerse parte de lo que sería el Ejército Rebelde, para organizar junto a su padre y hermanos, el camino desde la Sierra y el campesinado que educaban en la propia lucha por ser dueños de su tierra.
Un hombre con el sueño de ser militar, tanto como la disciplina para enrolarse en donde se le pidió que estuviera, las actividades administrativas  de la naciente revolución cubana.
Como el Che anduvo de una a otra parte del país, adonde lo llevara la fluidez de su vida, con la entereza de quien debe entrarle de frente, desde gigantes que se le enfrenten sin pedir permiso, lo reten como persona,conminándolo a seguir pase lo que pase, a comprometerse, a crecerse, a forjarse, a nacer una y otra vez, hasta llegar a 83 años de edad, con las ganas de seguir adelante.
En su dolor, más que la edad asumía, con especial espíritu, lo que el mío le sugería para repetirse, “elijo sanar”, o repetirle a quien le interpelaba “de aquí no me voy (de casa de su hermana ñica) hasta que no suba 25 kilos” (no ya las 25 libras que había dejado).
Solía tejerse sueños de ser cuidado por su hermana en otra provincia o rodearse del confort de uno de los hijos a quien le dio vida, ya en otras tierras.
Mi madre, quien en más de una ocasión, antes y después de mi existencia, ha querido dejar esta vida, pierde a uno de sus más grandes pilares espirituales en su familia. Ahora le toca despedir a su tercer hermano en 3 años, aunque hace menos de un año que perdió a otra de sus mayores.
La familia “de la Torre” dejó ir a sus mayores, Ana (agosto 2017), Avito (junio 2018) sin que se detenga ese legado humilde y poderoso que le apellida, sin que se amilane su fuero, aquel en la Sierra Maestra, Cedo, o de Santiago de Cuba a La Habana, Javier, o en el propio Bayamo, Fe, quien hasta después de ida en su viaje final quiso aparecer en el sueño de su hermana, unos meses menor, para recomendarle a Chávez que pronto se le uniría en el deceso.
Todas despedidas tristes, fuertes, agigantadas con Yordano (La Habana, 2013, con solo 11 años de vida).
Cada uno de ellos es una huella profunda, única, poderosa en sí. Cada una lleva ese dolor personal en el coro familiar más pequeño, cada uno es una parte de todos los “de la Torre”, para quienes la risa, el canto o la seriedad de un propósito es un camino indetenible.
Se fue Avito Rafael de la Torre Mora, sus hijos: Heriberto, Estela, Ángel, Miguel, Avito, Yudexi, Joaquín, Lenard y yo, sumada por él mismo, fundada en su camino; le recordamos en esa sonrisa de maldad que muchas veces alumbraba a la familia donde aparecía de repente porque esa era la guagua que había pasado, o viraba con el objetivo de averiguar dónde se quedaría entre tantos invitados y la poca cama.
Ese reír, luego de un accidente frente amí, accidentada también, para probarnos quién se había dado más golpes, o el que seguía el camino del militar a todas partes como parte de su sueño no cumplido, con orgullo despedirlo en la distancia del deber o en la actriz, la chilena – cubana, o los que como Don Quijotes le hacían el juego de mellizos para estar en igual grado del curso escolar, no separarse, ir a Etiopía, cambiarse de apellido, comandar trabajos, enrolarse en aventuras diversas con el pequeño de esa camada de huérfanos, que su tamaño de investigador como lector empedernido o licenciatura – a destiempo, nunca tarde - en estudios Socio Culturales le hizo ser el más grande de los tres.
Es la búsqueda incesante de uno de sus hijos, que quizás ni quiera aparecer, de elegancia divina, para ser un guiñapo con la mala jugada de la vida, una historia incógnita para todos y el amor de esos fuertes que dicen esperar siempre con la puerta abierta al irredento.
Las historias de su prole o las propias de sí mismo, fueron muchas, que con seguridad recorrerán una y otra vez reuniones familiares, cada vez menos, entre risas, canciones, llantos, décimas enroladas ya por último en la Casa del Abuelo, en Mabay, en controversias de concursos, historicista o profesor de los adolescentes.
Dejar, buscar, acompañar o desaparecer de momento con un “vengo más tarde”, solían ser parte de ese tío cotidiano, queriendo encontrar siempre a su Hery, siguiendo el camino con la primera viudez a cuesta y la casi última, en dueto, con una memoria perdida entre dos historias, o un último amor de juventud, celada por hermanos mayores.
Sus décimas recorren lahistoria de su vida, encuentros y desencuentros, ideas, ocurrencias, textos que alguna vez uno de sus hijos y yo digitalizamos, así las perdimos en el vaivén de las tecnologías. En impresos, en tertulias familiares o en la observación feliz del encuentro más grande que recuerdo de todos sus hijos e hijas, de bailes, coreografías, risas, competencias coreográficas, nuevas historias y siempre el deseo de ver escrito, impreso, editado sus poesías, narraciones o anécdotas. Un tiempo incansable para quedar en blanco y negro aunque fuere un combatiente en todas sus letras, sin medallas.
Casi al final, envuelto en el cansancio de no querer ponerse más los dichosos sueros, pues cuando iba mejorando – decía,  - tenía que volver de nuevo a ellos -, o de dolores incontrolables, aferrarse a los lugares, enarbolar el orgullo de su atención de primera en hospitales militares o por donde supo que pasaban militares con un alto historial a quedar entre sus primeros hijos, con el amor de desarrapado por la pérdida maternal.
Es triste verlo irse, aun con el cuerpo sano de otros dilemas, agotado de esos agobiantes días, hechos más largos por el dolor o la impotencia, casi los primeros de su larga vida, aun corta para los que le queremos, a solo unos del día de los padres…ese grande celebrado en Bayamo, por sus dirigentes para los padres combatientes y las recientes víctimas del accidente aéreo que sólo dejó a una con vida.
Te he dedicado otras poesías, otras palabras, otras ideas, tío, ya lo sé, pero  se me borraban, no podía más que leértelas. Hoy quiero que vayan contigo tanto como se quedan conmigo como el dibujo más rápido que ha terminado mi hijo, el puño que querías para graficar tu libro.
Tu fuerza que nos acompaña siempre, tu carisma, tu autenticidad. Gracias.
Tío: son dolores que rasgan la vida de la canción, que también hacías, la canción que es vivirla, el letargo impotente que significa “el origen”, de la familia, de la especie, los valores en que se ancla la existencia misma, la más sutil. Es el camino del propósito que unos tienen más corto, otros más largo.
Unos desde otra geografía, con el mismo latir, al unísono, esa fuerza que da despedirte entre tus propias interpretaciones de la vida, en la décima y en el canto, en tus mujeres e hijos que te han querido. En esa nieta que espera un bebé o aquella que el mismo día de tu deceso coronaba la vida con los más hermosos 15 años que una familia puede acurrar.
Hasta siempre tío,
Te amamos.
TGY

Un viaje inesperado


Dentro de mí misma puede ser un enredo capaz de intervenir en todos mis momentos, capaz de paralizar la respiración con el asma, con dolores, con pánicos, con indecisiones constantes, mientras entra esa resolución inequívoca de seguir adelante, del agradecimiento porque aparece la capacidad positiva de crear, de compartir ideas, de cocrear nuevos caminos, incluso de ser excesiva en tareas  con un tiempo menor. Me educo, a la vez estudio, estudio, estudio…
Los temas son disímiles, el deseo fluctuante, las metas cada vez mayores, como mayores los obstáculos.

Molestias


Muchas veces temí que el viaje en la vida para ser  madre me provocara inapetencia sexual, odios a la humanidad, mal humor. Me sorprende esta edad, mañana 51 años, en medio de esa etapa nueva archiconocida, temida igualmente por todas, con alto peligro de embarazo. Se va o no se va, ni siquiera importa, sino los altos y bajos de humor, amor, sangrado, sexo, dudas, decepciones y la caída de ídolos, etapas, orígenes.
Uno de esos hijos que me da la vida, de familia miga, me dijo, cuando la adolescencia le rompía a la juventud, mirando las dificultades de su familia, - me han engañado, he vivido toda mi vida en la mentira, la familia que quiero no es lo que yo pensaba. Yo simplemente le dije,  - duele crecer, duele darse cuenta de las cosas, duele saber cómo los demás hicieron para que no me afectara lo que pasaba a mi alrededor.
Éste tiempo de mujer, de segunda redención es como una adolescencia a juventud, lo que duele más porque el engaño es con uno mismo, es como el darse cuenta y saldar tiempos que no son nada nuevos, que son años sumados y darse cuenta, así sencillamente darse cuenta que la vida se pasa y estamos varadas en algo… que las personas te pueden dar la espalda, que sencillamente trabajar, tener ideas, querer producirlas es también complicado en un mundo que estudiar, trabajar, amar a la familia pueden ser tan pecadores como lo contrario… cuestión de perspectiva humana o de tiempos y miedos de otros.
Si me dices, si no me dices, si quiero escuchar, si no quiero que nadie me hable, si cambié, si cambiaron los otros, si soy parte generacional o de los tiempos del mundo mundial, donde todos los ídolos se pierden, de catástrofe natural, social, política, económica… o ya ni sabe si es tiempo mediático de construcción o deconstrucción de cánones para homogeneizar  poderes y pobrezas, es un tiempo de qué se yo… o solo sé que no sé nada.

Hoy


Debo escribir, igual no puedo dejar de pensar en los muchos libros que escribiré, que publicaré en papel u on line.
Es quedar una vez más en blanco porque la cama me llama, el ocio, las ganas de dormir para no dormir de pronto.
Sedo el tiempo pensando constantemente en lo que debo hacer, igual no inicio, aunque confieso que envidio a esos que me rodean y no paran de hacer algo, de quejarse o de inventarse algo para mantenerse ocupados. Otras veces me da una especie de ganas, me levanto o a la hora que sea hago algo de ama de casa, limpio, friego, lavo, cocino, sacudo.
Otras tantas me levanto con una idea y escribo sin parar… de lo que debo o de lo que me inspira escribir, ya me servirá en mis caminos de letras y desafíos, de distorsiones.